Porsche 953 4×4, el primer 911 que ganó el Dakar

Corrían los años ’80 y todavía era habitual que los pilotos saltasen de una disciplina a otra. Jacky Ickx fue uno de esos corredores polifacéticos que combinó durante una década la Fórmula 1 con los campeonatos de resistencia, y como no tenía suficiente, complementó ambas competiciones con el Dakar. En 1983, el año de la terrible tormenta del Teneré, se hizo con la victoria en la prueba africana al volante de un Mercedes G. En aquella época la relación de Ickx con Porsche era excelente, ya que había llevado a la marca de Stuttgart a lo más alto en LeMans en nada menos que en cuatro ocasiones. Fue el propio Ickx el que convenció a Porsche de las posibilidades de un 911 4×4 y en Julio de 1983 comenzó del desarrollo del futuro Porsche 953.

Había que diseñar y construir un vehículo competitivo en un tiempo récord y la marca designó a Roland Kussmaul como jefe del proyecto. La elección no fue casual, Kussmaul ya había desarrollado los Porsche 911 que se alzaron con la victoria en el Rallye Safari de 1978 y fue el encargado del Porsche 956 con el que Ickx había vencido en las 24 Horas de Le Mans de 1983. El primer reto que había que abordar era la implantación de un sistema de tracción integral. La simplicidad del motor trasero longitudinal permitió llevar un árbol de transmisión hasta el tren delantero sin grandes reformas. Se instaló también un diferencial central que se podía bloquear manualmente y que se encargaba de repartir la potencia entre ambos ejes. Afortunadamente la instalación de esta ingente cantidad de hierro bajo el coche mejoraba el pésimo reparto de masas del 911 original.

Otro de los puntos a abordar fueron las suspensiones. La del eje delantero fue directamente sustituida por una de dobles brazos reforzados y dos amortiguadores Bilstein de gas por rueda. Para el puente trasero se optó por la suspensión del Porsche 930 Turbo, a la que se le recubrieron los brazos con una capa de poliéster. La altura libre al suelo fue incrementada hasta los 260 mm, lo que unido a unos neumáticos todo-terreno 205/80R15 le permitía superar casi cualquier obstáculo. Salvo por la jaula anti-vuelco y los refuerzos pertinentes, el resto de la carrocería autoportante se mantuvo prácticamente de serie, sustituyéndose algunos paneles no estructurales por otros de materiales ligeros, que mantuvieron el peso del coche en 1235 kg, muy similar al modelo de serie a pesar de todas las mejoras.

Para propulsar el vehículo se optó por el bloque de 3164 c.c. y 231 CV del Carrera 3.2, ya que se consideraba mucho más fiable que 3.0 de 255 CV del Porsche 911 SC. Además se redujo la relación de compresión a 9,7:1 para poder utilizar gasolina de 90 octanos. Esta rebaja de la compresión situó su potencia en 225 CV a 5800rpm. Para garantizar la autonomía en las largas etapas africanas se instaló un depósito auxiliar de de 130 litros detrás de los ocupantes que complementaba al depósito habitual bajo el capó delantero que había crecido hasta los 140 litros para la ocasión.

Tras menos de 6 meses de desarrollo, Porsche presentó tres vehículos al Dakar de 1984; El principal tripulado por Jacky Ickx y Claude Brasseur, un segundo equipo formado por René Metge y Dominique Lemoyne y un coche de apoyo con el mismísimo Roland Kussmaul copilotado por Erich Lerner, jefe de mecánicos de Porsche. Ickx, tras ganar cuatro etapas consecutivas, llegaba lider a la 8ª especial entre Agadez y Niamey. Un Incendio destruyó la instalación eléctrica de su 911, que aunque fue reparada in-situ por su asistencia, las más de 3 horas perdidas hacen que se esfumen sus opciones de victoria. Metge recoge el testigo y tras ganar esta especial se pondría en cabeza, conservando este puesto hasta el Lago Rosa y consiguiendo la primera victoria de Porsche en el Dakar. Ickx continuaría ganando etapas y remontando posiciones, finalizando 6º en la general de Coches. Kussmaul y Lerner sufrieron dos aparatosos accidentes que no les impidieron finalizar la prueba y hacerse con la victoria de la etapa final. Tras haber dominado esta edición, se dice que Porsche utilizó las soluciones del 953 para desarrollar el Porsche 959 con el que volvería a dominar en el desierto en 1986, pero eso ya es otra historia…

FICHA TÉCNICA