Un año más, la carrera que recupera el espíritu y recorrido original de los primeros París-Dakar, volvió a llegar al Lago rosa de Dakar. Al igual que en anteriores ediciones, los participantes se concentraron el 30 de diciembre en Mónaco para tomar un ferry que los llevase hasta Nador donde comenzarían 11 etapas que atravesarían Marruecos, Sahara Occidental, Mauritania y Senegal.
En motos la victoria fue para Jacopo Cerutti (Aprilia) que, a pesar de sólo haber vencido en cuatro de las especiales, su regularidad le permitió liderar la general desde la primera etapa. El pódium, que se mantuvo inalterado desde la 7ª etapa, lo completaron Alessandro Botturi (+6′ 38″ y 4 victorias de etapa) y Pol Tarrés (+25′ 09″ y 3 victorias de etapa), ambos sobre una Yamaha.
En coches, la situación fue muy parecida, ya que salvo por la victoria de Carlos Vento en la primera etapa, el resto del Rallye la general estuvo encabezada por Gautier Paulin y Remi Boulanger (Apache), que con tan sólo dos victorias de etapa se alzaron con el triunfo en el Lago Rosa gracias a su regularidad. la segunda posición la ocuparon, Pascal Feryn y Kurt Keysers (Toyota a 3h 45′ 08″) seguidos de Carlos Vento y Carlos Ruiz Moreno (Can-Am a 5h 09′ 09″)
En cuanto a camiones, para los que no existe una clasificación específica y la comparten con los coches, el Tatra de Tomas Tomecek, que volvía a afrontar la prueba en solitario sin copilotos, fue el mejor posicionado alzándose hasta la 4ª plaza de la general, a 6h 13′ 56″ del vencedor. El 5º clasificado fue el Scania de Aad Van Velsen, Michel Van Velsen y Marco Simeons, que se situaba a 8h 30′ 05″ del primer clasificado.
