Ford Fiesta MkI. Historia y ficha técnica

A principios de los ’70, tras la crisis del petroleo, aumentó la demanda de coches pequeños de bajo consumo. Ford se dio cuenta de que necesitaba añadir un vehículo a su gama para competir con los Renault 5 y FIAT/SEAT 127 que arrasaban en Europa. Finalmente, tras varios años de estudios, el Ford Fiesta salió al mercado en verano de 1.976, aunque las primeras preseries se comenzaron a ver a finales de 1.975.

El Ford Fiesta se trataba de un pequeño utilitario de motor y tracción delanteros, disponible únicamente en carrocería de tres puertas, que nació del Proyecto Bobcat. A pesar de que Bravo fue el nombre que mayor número de votos obtuvo para nombrar al proyecto Bobcat, Henry Ford II, presidente de la compañía, optó por Fiesta, aún cuando esta denominación estaba registrada por aquel entonces por la General Motors, que se la acabó cediendo de forma gratuita a Ford.

El Fiesta siguió la línea de diseño inaugurada por el Ford Granada cinco años antes con tal fidelidad que mirado de frente parecía un Granada en miniatura. La gama de motores la abría el pequeño motor de 957 c.c., disponible en alta compresión (1:9,1 y 45 CV) y baja compresión (1:8,3 y 40 CV), este último especialmente fiable y robusto. También se podía equipar al fiesta con bloques de 1.1 litros (53 CV) y 1.3 litros (60 CV). En 1.980 apareció la primera versión deportiva del Fiesta, el 1.3 SuperSport, potenciada hasta los 66 CV y con un equipamiento específico que incluía neumáticos de perfil 185 que influían negativamente en sus prestaciones. En 1.981 llegó el XR2 equipado con un motor de 1.6 litros y 83 CV, que le permitían alcanzar los 170 km/h, rivalizando directamente con el Renault 5 Copa, de precio más elevado, pero con 93 CV y 5 velocidades (El XR2 montaba una caja de sólo 4 relaciones). Esta versión deportiva sirvió como base para la homologación de una versión de competición en el Grupo 2.

En cuanto a acabados, el Ford Fiesta estuvo disponible en versiones L (la más básica), S (equipamiento medio-deportivo) y Ghia (la más lujosa), además de las versiones deportivas SuperSport y XR2 mencionadas anteriormente. Al entrar en un Fiesta, una de las primeras sensaciones percibidas era la de estar en un coche sumamente ancho, con un habitaculo muy luminoso y unos cómodos asientos delanteros. Para los pasajeros de las plazas traseras había espacio suficiente incluso con los asientos delanteros situados en su posición más retrasada, además, una vez abatidos la bandeja y el respaldo del asiento trasero, quedaba una gran superficie de carga a la que el generoso protón trasero permitía un excelente acceso.

El Ford Fiesta se convirtió inmediatamente en un superventas, de tal forma que en 1.979 ya se habían fabricado un millón de unidades. Además supuso la entrada de Ford en el hermético y protegido mercado automovilístico español de la época. Se construyó en Almusafes (Valencia) una fábrica inaugurada por el mismísimo Henry Ford II y que se dedicó inicialmente en exclusiva a la fabricación de este utilitario. En 1.983 llegó la segunda generación del Fiesta, que no era más que un restyling de la primera.

FICHA TÉCNICA