Morgan Motor Company fue creada en 1.910 por H.F.S. Morgan. Sus primeros coches fueron triciclos biplaza y cyclecars, de forma que se podían matricular como motocicletas para evitar el desmesurado impuesto de matriculación de la época exigido por el gobierno británico a los automóviles (un 33% de su precio final). Morgan no fabricó su primer coche de cuatro ruedas hasta 1.957. El Morgan 4/4 debía su nombre a su nueva configuración; 4 cilindros y 4 ruedas. En 1.968, Morgan lanzó al Mercado el Morgan Plus 8, que equipaba un motor V8 de origen Rover y que en sus versiones más potentes contaba con más de 190 CV.
Morgan siempre se ha caracterizado por ser una fábrica tradicional, en la que los operarios construyen artesanalmente cada pieza del coche y la ensamblan con sus propias manos, lo que ralentiza el ritmo de producción y crea listas de espera de varios años para poder obtener un coche. Esto ha generado una especie de mercado especulativo en el que las unidades de segunda mano, para las que no hay que esperar, pueden llegar a superar el precio de los vehículos nuevos.
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